Es sin duda una noche difícil.
Todo el día se padeció en la ciudad frío y vientos
intensos. Por la tarde se hizo sentir también la presencia de la lluvia y,
sumado a esto, muchos “bunburyanos” se habían visto en la disyuntiva de tener
que elegir, ya que esta misma noche en Gualeguaychu se estaría presentando uno
de los artistas argentinos más míticos, el Indio Solari.
Con la puntualidad propia de
un zaragozano detallista, a las 21.10 se apagaban las luces del Estadio Luna
Park y la pantalla detrás del escenario proyectaba imágenes de una nave
viajando en el espacio que de pronto se detiene, abre su compuerta y envuelto
en luz deja sobre una tarima detrás de la batería al Maestro.
Al prenderse las luces del
escenario, los demás músicos de la banda ya están en sus puestos y empiezan a
interpretar “Despierta” (canción que abre el octavo disco solista de Enrique
Bunbury “Palosanto”). “Despierta! Despierta de una vez!” repite la canción mientras por las pantallas se pueden ver fragmentos de
diferentes líderes políticos mundiales dando discursos. Siguen con “El Club de
los Imposibles”, perteneciente a “Flamingos”. El público de las plateas ya se
levanta de sus sillas y todos los presentes bailan mientras corean esta, una de
las piezas más queridas por los seguidores de Bunbury en su carrera solista.
Antes de seguir con el set
list, Enrique saluda a los presentes y agradece su presencia. “Agradecemos a
todos los que vinieron, a todos los que nos eligieron. Mandamos un saludo a los
que se fueron a ver al Indio Solari. A todos nos hubiera gustado estar allí” y
con la respuesta del público, entre aplausos y silbidos, todavía resonando, la
banda interpreta Los Inmortales, otra pieza de su más reciente disco que están
presentando esta noche. “Ahora vamos a tocar una de Radical Sonora” anuncia
Bunbury como preámbulo para “Contracorriente”, una canción que no suele estar
presente en sus shows.
Hacia 5 años que Enrique Bunbury no se presentaba
en el Luna Park (en 2009 vino en el marco de la gira presentación de su álbum “Hellville
De Luxe”), y haciendo una comparación entre ambos shows es notoria la evolución
en la complejidad del aprovechamiento de recursos que le brinda el estadio. En
el escenario hay tres tarimas, a la izquierda el Reverendo Rebenaque en los
teclados. A la derecha se ubica Quino Bejar en percusión. Al medio, Ramón Gacías
en batería. Al frente, Robert Castellanos al bajo, al lado de él Alvaro Suite
(con su siempre particular vestimenta pop rock clásica) en segunda guitarra y
Jordi Mena en primera guitarra. La puesta en escena la forman dos pantallas
laterales que muestran el desempeño de Enrique y su banda en vivo. Detrás de la
batería, una pantalla que ocupa todo el largo del escenario acompaña las
canciones con imágenes alusivas. Mientras que las luces son un show aparte:
impresionante el desempeño de quien haya estado al mando de las consolas,
demostró una habilidad exclusiva para el uso de equipamiento de alta gama, con
algo que a Bunbury siempre lo favorece que es la iluminación en diferentes
colores durante el recital.
El show alterna canciones de
las más antiguas con las de esta última placa y genera un ambiente de altibajos
emocionales. Así es que suenan canciones como “El Hijo de Cortes”, “Ódiame” (canción
popularizada por Julio Jaramillo de la cual Enrique hizo su propia versión e
integra su álbum compilatorio de canciones latinoamericanas “Licenciado
Cantinas”), “Mas alto que nosotros solo el cielo”, “Porque las cosas cambian”, “Destrucción
Masiva” (una de las letras de mayor disputa política de este último disco,
acompañada con imágenes de marcas comerciales y de bancos de todo el mundo
bañados en sangre) y “El extranjero”.
En este punto, a casi una hora
de show, Enrique cede a uno de los pedidos mas reiterados del público e
interpreta una canción de Héroes del Silencio. Una versión “bunburyzada” de “Deshacer
el mundo”, mientras que en la pantalla detrás del escenario se pueden ver
imágenes de desfiles militares y represión policial en actos de diferentes
partes del mundo. Al finalizar la canción, el publico corea “Heroes! Heroes!”
pidiendo que se toque una más de esta gran banda que supo liderar Enrique, lo
que fue en vano.
Continúan el show volviendo al
repertorio perteneciente a la carrera de Bunbury solista, esta vez con “El
Rescate” (perteneciente al disco doble “El viaje a ninguna parte”) enganchada a
la cual tocan “Los Habitantes” (canción que se encuentra “Las Consecuencias”,
disco que presento en Argentina en 2010 con tres shows en el Teatro Gran Rex y
de los cuales edito un disco en vivo titulado Gran Rex).
La calidad de sonido del show
no es impecable, como si supieron ser algunas presentaciones de años anteriores
en nuestro país. Hubo partes del recital en que Rebe al teclado sonaba más alto
de lo esperado causando incomodidad en la canción, y momentos en los que Alvaro
Suite a la guitarra sonaba por encima de Jordi provocando también desperfectos
en canciones que suelen sonar muy prolijas en todas las presentaciones. Aún
así, el show continúa y suena “Salvavidas”, “El hombre delgado que no flaqueara
jamás” y “Hay muy poca gente” (canción de “Hellville” que tiene su videoclip
oficial y del cual se dejan ver fragmentos en la pantalla principal).
“A ver los del fondo, están
escuchando bien? Y por aquí a la derecha? Y ustedes allá? Estamos todos? Para
esta canción necesitamos de sus gargantas bien afinadas y bien argentinas” Con
esta presentación generando en el público gritos y aplausos se da pie a “Frente
a Frente”, siguiendo con “Que tengas suertecita” (“Que tengan suertecita,
argentinos y argentinas”), “De todo el mundo” y “Sí” (“Ante la duda, ya saben,
siempre si”).
“Un placer haber compartido
esta noche con ustedes. Es siempre un placer. Con esta canción nos despedimos” anuncia
Enrique antes de “Lady Blue”, un clásico de “Flamingos”. Presenta a Los Santos
Inocentes y se dirige a la tarima donde, la nave que al inicio del show lo
había dejado allí, ahora pasa a recogerlo.
Las luces del escenario se
apagan pero no se prenden las del estadio. Aquellos que son público asiduo de
Enrique Bunbury saben que no deben retirarse aún. A los pocos minutos, las
luces vuelven a iluminar a la banda que ha regresado al escenario y ahora hay
dos micrófonos en escena. Enrique
presenta a “un amigo, gran artista y compañero: Manuel Moretti, el Estelar” con
quien colaboro en una canción del último álbum de su banda (Estelares) y que
esta noche lo acompaña para cantar “Puta Desagradecida”, canción que se
encuentra en “El tiempo de las cerezas” (álbum doble hecho en 2006 con “el
hermano Nacho Vegas”). Despide a Moretti y sigue con “Bujías para el dolor” e “Infinito”.
A esta altura el público ya sabe que se acerca el final del show, pero a pesar
de que la banda vuelve a retirarse y las luces del escenario se vuelven a
apagar por completo, se sabe que aún queda más.
Aquellos que durante la
estadía de Bunbury en Argentina se mantuvieron informados de sus actividades
saben que en la noche del viernes Enrique tuvo la visita de su viejo amigo Andrés
Calamaro, y que éste había anunciado que formaría parte del show. Así es que
nadie se movió de su sitio y pasados unos minutos vuelve a iluminarse la escena
y se vuelve a ver el segundo micrófono y una guitarra nueva entre los
instrumentos.
Enrique vuelve y expresa: “Venimos
desde muy lejos a cantarles a ustedes. Mañana es domingo. Quien coño se tiene
que levantar pronto un domingo? Déjennos tocar para ustedes un poco más” El
público estalla en aplausos, gritos, y el recurrente cantico de “Enrique
Enrique” suena cada vez más alto y con más pasión. El pueblo argentino siempre fue muy devoto de
Héroes del Silencio y ahora de la etapa solista de Bunbury. Es evidente la
veneración que le profesan a este artista y su banda, y se lo demuestran en
este impasse del show. Las pantallas laterales muestran ahora al público y se
puede ver a Los Santos Inocentes con Enrique sorprendidos ante esta reacción de
la gente. El zaragozano vuelve a agarrar su micrófono y por sobre los gritos de
la gente agradece por esta demostración de cariño y procede a presentar al
segundo invitado de la noche.
“Para mí, es un inmenso honor
presentar a nuestro siguiente invitado, amigo y maestro. No necesita
presentación, todos le conocen. Andrés Calamaro” Todo el estadio aplaude con algarabía,
demostrando verdadera admiración, mientras Andrés saluda al Luna Park y Enrique
anuncia “Vamos a cantarle algo bonito para ustedes” dando pie así a “Cosas
Olvidadas” (un tango de Antonio Rodio que Enrique incluyo en “Licenciado
Cantinas”), con Rebenaque al frente ejecutando un acordeón y Álvaro rasgueando
una guitarra acústica. Después de esto Calamaro no se va, sino que se cuelga su
guitarra y junto a la banda interpretan “Apuesta por el Rock and Roll” (canción
de Mauricio Aznar popularizada por Héroes del Silencio).
Luego de esto si llega el
momento de la despedida. Andrés Calamaro se retira del escenario y la banda
interpreta “Viento a Favor”, canción con la que se da cierre a este show de fin de gira Latinoamericana de
presentación de Palosanto.
“Muchas gracias de verdad a
todos. Hasta siempre Argentina” se despide Enrique Bunbury, mientras los Santos
Inocentes regalan púas y listas a los presentes que están más cercanos al
escenario. Se abrazan, y saludan a todo el estadio mientras ahora sí, las luces
del escenario y todo el estadio se encienden y en la pantalla principal se lee
“Argentina, gracias por todo”.
La banda se pierde entre los
pliegues de los telones laterales que dan paso a los camarines y el Luna Park
despide a la multitud con “Stand by me”.
LISTA DE TEMAS:
Despierta
LISTA DE TEMAS:
Despierta
El Club de los Imposibles
Los Inmortales
Contracorriente
El hijo de Cortes
Ódiame
Mas alto que nosotros solo el cielo
Porque las cosas cambian
Destrucción Masiva
El Extranjero
Deshacer el Mundo
El Rescate
Los Habitantes
Salvavidas
El hombre delgado que no flaqueará jamás
Hay muy poca gente
Frente a Frente
Que tengas suertecita
De todo el mundo
Sí
Lady Blue
/Intervalo/
Puta Desagradecida (Con Manuel Moretti)
Bujias para el Dolor
Infinito
/Intervalo/
Cosas Olvidadas (Con Andres Calamaro)
Apuesta por el Rock and Roll (Con Andres Calamaro)
El Viento a Favor
Buen shooow!! Buena crónica!! Maestro Bunbury...
ResponderEliminarIncreible como siempre querida amiga :)
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